CURADOR DEL MOMA DESMITIFICA EL ESTILO BAUHAUS


Barry Bergdoll, dictó una charla en el auditorio de la UCV sobre las facetas desconocidas de la escuela alemana. Este artículo se fundamentó en una entrevista realizada al Curador Jefe de arquitectura y diseño del Museo de Arte Moderno de Nueva York.


Por Elina Pérez Urbaneja


Fotos Cortesía Bauhaus-Archiv Berlin/Neue Sammlung/Robin Holland

Con motivo del 90 aniversario de la fundación de la Bauhaus, Barry Bergdoll, curador de arquitectura y diseño del Museo de Arte Moderno de Nueva York (MOMA), asumió una tarea complicada a la vez que minuciosa: desmontar algunos mitos que, a su juicio, han empobrecido el conocimiento sobre esta famosa escuela.

Considera el curador que el estilo creado por la Bauhaus es un mito que no es “exactamente correcto, porque en realidad se tomaron formas y prácticas que ya se habían desarrollado en pequeñas escuelas anteriormente existentes. La Bauhaus terminó siendo como una agencia de relaciones públicas, y más adelante se convirtió en el paraguas que arropó las profesiones del diseño gráfico e industrial, pero a raíz del desarrollo de la tecnología digital, se han suscitado revoluciones importantes en estos campos”.

Todos estos aspectos los presentó Bergdoll en la charla “Bauhaus 1919-1933: taller de modernidad”, que tuvo lugar recientemente en el auditorio de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la UCV.

Después de dos años de revisar documentos escritos, fotográficos y numerosos trabajos elaborados por estudiantes y profesores, conservados en los archivos del Museo Bauhaus en Weimar, la Bauhaus Dessau Foundation y el Museo Bauhaus en Berlín, Bergdoll consideró primordial develar “facetas desconocidas, a través de piezas de diseño gráfico, diseño de muebles, cerámica, textil y pinturas, no tan conocidos, pero que muestran el aporte en la educación artística, a través de la creación del curso fundamental y los talleres prácticos donde se fusionaron las bellas artes y las artesanías de manera experimental”.

Resaltó entre las piezas la “silla africana” creada por Marcel Breuer, la cual conocía por “fotografías a blanco y negro, hasta que apareció el objeto en muy buen estado de conservación”.

La exposición Bauhaus 1919-1933: taller de modernidad, en la que trabajó Bergdoll y que clausuró el 25 de enero de este año, fue la segunda muestra sobre la legendaria escuela alemana que ocupó las salas del MOMA. La primera exhibición, organizada en 1938, lanzó las ideas de esta institución al mundo e instauró el paradigma del “estilo Bauhaus”.

El origen de todo
La palabra Bauhaus surge de la unión del prefijo “Bau” y el sufijo “Haus”, que arrojan como significado: “casa de construcción”. Fue fundada en 1919 en la ciudad de Weimar, siendo nombrado director, el joven arquitecto Walter Gropius, quien ese mismo año publicó el Manifiesto de la Bauhaus, como declaración de principios.

A causa de la ideología que la dominaba, la escuela tuvo que hacer frente a una fuerte oposición política en Weimar, hasta que las autoridades locales –pertenecientes al Partido Nacional Socialista-, le retiraron el apoyo. De esa manera, en 1925, fue trasladada a la ciudad de Dessau. Una vez allí, se emprendió la construcción de una sede concebida por el propio Gropius: un edificio de estructura prefabricada en líneas simples.

En 1928, Gropius cedió la dirección al arquitecto de origen suizo Hannes Meyer. El nuevo director destrozó el concepto del estilo Bauhaus, privilegiando la fabricación de artefactos “sin estilo”, que se regían por la funcionalidad y el bajo costo, de modo de que pudieran ser asequibles para la clase trabajadora. En 1930 asumió la dirección Ludwig Mies van der Rohe, quien además de despolitizar la institución, privilegió la arquitectura sobre las artes aplicadas. Para ese entonces, el Partido Nazi ya había tomado vuelo en Alemania; teniendo Mies entre sus manos el reto de lograr la sobrevivencia de la Bauhaus, mudándola a Berlín en 1932, donde finalmente es clausurada por la Gestapo. El 19 de julio de 1933, los profesores votaron a favor de la disolución de la escuela, lo que marcó el comienzo de la diáspora de sus integrantes por el mundo.

RECUADRO
Barry Bergdoll trabajó también en las exhibiciones “Mies en Berlín”, en 2001, y “Marcel Breuer, design and architecture”, en 2002, muestra que ha viajado entre Estados Unidos y Europa, arrojando luces sobre la influencia de estos creadores de principios del siglo XX.

Venezuela es la segunda parada que realiza el historiador del arte, en el marco de un proyecto de investigación sobre la tradición moderna en América del Sur que culminará con una exposición que tendrá lugar dentro de dos años. Bergdoll manifestó después de recorrer la Ciudad Universitaria, que es el “monumento más relevante de la arquitectura moderna en Latinoamérica, mucho más impactante de lo que sabía sobre ella”.

Artículo publicado en el suplemento Espacios del diario El Nacional
domingo 7 de marzo de 2010, p. 4.