Productos tejidos con
materiales reciclados, una vía al Ecodiseño.
Su casa-taller es un pequeño
refugio natural ubicado en los Altos Mirandinos en el que se disfruta el
silencio y el frescor. En las cuerdas del jardín no cuelga ropa, sino empaques de
diferentes tipos de alimentos limpiados y cuidadosamente desemsamblados. Esa es
la materia prima para gran parte de los productos de la diseñadora venezolana MonnaGu.
Las carteras tejidas con los
papeles de empaques usados son sus piezas más conocidas por ser las que se
comercializan en varias tiendas de diseño, mientras que su creación más
reciente son las papeleras armadas con banners reciclados, que ganaron un
premio convocado por la Coca-Cola.
Monna Gutiérrez estudió hasta 3er
semestre de arquitectura, pero luego se cambió para inscribirse en Prodiseño,
formando parte de la primera promoción de esta escuela. Como profesional ejerció
el diseño gráfico para instituciones culturales.
Comenta que como siempre tuvo la inquietud
por desarrollar un lenguaje propio, estudió diseño para canalizar su necesidad
creativa. Desde muy joven desarrolló piezas artísticas que involucran volumetría.
El reciclaje no llegó como
revelación divina, sino a partir de la prolongada experimentación con
materiales de desecho que comenzó a recoger para investigar sus posibilidades
plásticas y expresivas. Los primeros resultados fueron piezas tridimensionales
hechas con botellas de plástico, una de las cuales fue galardonada en el SalónFIA .
Actualmente el Ecodiseño es su
modo de vida, y así se refleja en su refugio. Abre el refrigerador para sacar
unos hielos congelados en empaques de huevos, el colador para la pasta lo hizo
a partir de envases para helados, sus individuales y portavasos están
elaborados con la misma técnica de las carteras. Si fuera por ella, todos los
objetos de su vida cotidiana serían el resultado de su visión ecológica.
Si bien sus pininos fueron
artísticos, lo utilitario llegó en los últimos 3-4 años, a través de un taller
de reciclaje que no se dio. “Desde entonces enfrenté los materiales desde otro
ángulo”, comenta.
Señala que no le interesa el
enfoque de las manualidades, aunque su trabajo sea 100% manual y la mayoría de
la gente lo considere artesanía. MonnaGu señala que hace Ecodiseño porque para
concebir sus productos involucra un proceso de investigación y una metodología propia del
diseño.
Comenzó trabajando con algunos
tejidos que existían, pero que fue adaptando a su necesidad creativa y
productiva. “Los bocetos no son 100% necesarios, pero sí considero vital el proceso
de preparación del material”, asevera.
Además de los empaques que
configuran una trama multicolor, la diseñadora ha utilizado cintas de VHS que
genera una base lineal en negro.
Para MonnaGu el reciclaje no es una pose, sino una
alternativa real para dar rienda suelta a la creatividad.