EL MUSEO REACTIVADO

El martes de esta semana visité el Museo de la Estampa y el Diseño Carlos Cruz-Diez, y lo visité íntegramente. Me contentó ver todas sus salas llenas con exposiciones nacionales e internacionales sobre diseño.

Adicionalmente, he sabido de su programación musical y educativa que dinamiza  nuevamente estos espacios, luego de varios años encapotados, en los que desfilaron varios directores con gestiones tan breves que impedían darle cuerpo y coherencia al funcionamiento de la institución.

Desde hace poco más de un año llegó a la dirección el doctor Edgar González, con formación base como diseñador en Maracaibo, y con posteriores estudios de postgrado en Italia y en Alemania. Fue en este país donde obtuvo el doctorado en museología. González ha devuelto a la ciudad un museo dedicado al diseño con perfil investigativo y de reflexión.


En la Sala 1 está NoMateria. Todas las piezas las conocía previamente, menos éste proyecto de estudiantes de la EDI-ULA llamada Cachicama. Me pareció interesantísima y versátil. ¡Quiero una!
Una cosa es observar un objeto en foto, otra, verlo en persona. La imagen, muchas veces nos alimenta imaginarios que muchas veces no se corresponden con la realidad. Esto me ocurrió con el salero y pimentero Yare, más chiquitos de lo que había supuesto. Son una bellísima alusión a los diablos danzantes que ahora son Patrimonio UNESCO. El único detalle que cambiaría es la gráfica del empaque, que a mi juicio no le hace justicia a la finura de las piezas.

Estos son otros objetos que conocía  sólo en gráfica.  Son los agarra bolsas "Chao pescao". Simple y útil.


Interesante asiento. Se llama "Olga".
Esta silla de Marc  Flallo construida en maderas venezolanas,  me recuerda en algo la línea estética de Cornelis Zitman en Tecoteca.
Agradables estas lámparas de Albert Humet, su nombre, "Nefertiti" es clarísimo: ¿No les recuerda el famosísimo busto de la hermosa esposa de Akenatón?

Las mancuernas de DisPar han sido el único proyecto venezolano PREMIADO en la Bienal Iberoamericana de Diseño, lo cual es un gran logro. Desconozco los argumentos del jurado, pero en lo que a mi respecta, también la premiaría por 3 razones: primera, están fabricadas con aluminio reciclado, por lo tanto, son ambientalmente amigables. Segundo, como entreno en gimnasio, noto en ellas facilidad para el agarre y la manipulación, por lo que hay ergonomía. Tercero, se alejan de los "productos estrella" para los diseñadores venezolano, es decir, el mobiliario, por lo tanto, son una absoluta originalidad.

En el piso 2, al lado de la "Cámara de Cromosaturación" está la exposición consentida por nuestros medios de comunicación: afiches de Cruz-Diez. En ellos evidencia una producción prolífica que convierten al maestro del arte cinético, en una referencia para la historia del diseño gráfico venezolano





Muchos de los afiches están concebidos con el lenguaje del cinetismo.

Este afiche del brasileño Kiko Farkas es de la muestra internacional GlobAllMix, curada por Felipe Taborda. Lo fotografié para uno de mis estudiantes que le toca investigar sobre este creador.
Este cartel es del amigo colombiano Diego Bermúdez. Por cierto, en esta muestra que también está en el piso 2, no hay representante por Venezuela.

Finalmente, en el 3er piso hay "sopotocientos" afiches del concurso Desarmarte. Lo criticable de este espacio es que quedó tan ruidoso a nivel visual ante el notable afán de  "inclusión", que lo que causa es saturación e impide apreciar el trabajo de calidad y separarlo del que no la tiene. Arriba está (hablando de cosas buenas), el cartel de mi amigo Carlos Andrade.

Cierro con el afiche de Juan Madriz.