Efecto SHEIN: Tendencias de consumo e influencia de las Redes Sociales


El ultra fast fashion se aprovecha de las redes sociales para incentivar el consumo de prendas en tendencia. Pero ¿qué consecuencias tiene esto en la sociedad?

Por: Luisa Barrios, Collage: Victory Abi, equipo Esbaratao.

 



Es muy raro que no conozcas alguna tienda que venda ropa de SHEIN o algún truco para poder pedir en línea al menor precio posible. Prendas que pueden salir en $1 o menos y que suelen ser las protagonistas dentro de las redes sociales por sus hauls masivos, tendencias y colaboraciones con creadores de contenido.


SHEIN es una empresa electrónica dentro de la industria textil, inicialmente dedicada a la ropa femenina. Con el tiempo, expandió su gama de productos a ropa masculina, para niños, productos electrónicos, decoración, calzado, carteras, productos de belleza y muchos más.


La gran popularidad de la empresa se debe a la combinación de las redes sociales, una necesidad social de pertenencia y los influencers, logrando una fórmula de éxito dentro del consumismo actual y siendo el principal ejemplo de lo que se denomina ultra fast fashion.



Fábrica textil de SHEIN en China 

La colección de la temporada: el ultra fast fashion



Los diseñadores que vemos en las pasarelas de moda manejan un modelo tradicional en la creación de sus colecciones: temporada primavera/verano y temporada otoño/invierno. Prendas que se fabrican por un tiempo específico y tiene una producción limitada de productos.


Con la aparición de las marcas de fast fashion durante las últimas décadas del siglo XX, con marcas reconocidas como Zara, Forever21, Bershka, Primark, entre otras, la necesidad de tener prendas nuevas por bajos precios aumentó el interés de los consumidores e incrementó la producción de las tiendas, generando más de 50 colecciones por año siguiendo la idea de primavera/verano otoño/invierno. Reusar la ropa parecía un sacrilegio ante los ojos de los demás.


El ultra fast fashion no creyó en temporadas ni colecciones. Prenda de ropa que usa Bella Hadid es una prenda que dos días después se verá publicada en tiendas como SHEIN. La producción es aún más rápida, las tendencias más cambiantes y el desecho más grande.


También llega a verse en los hauls de 500 piezas o más realizados por creadores de contenido, mayormente en colaboración con estas tiendas para aumentar su visibilidad e influencia en el público. Las prendas que no llegan a ser usadas son desechadas y se preparan para el nuevo video, mostrando el paquete del momento enviado por esas marcas.



Estilo Coquette, tendencia a inicios del año 2024


¿De dónde surgen las tendencias?



Los desfiles de moda, las revistas y las colecciones no son ideas que salieron de la mente de una persona y casualmente un día todos decidimos usarlo. El éxito de una tendencia viene del estudio previo de los patrones de consumo y vestimenta en la sociedad y los cambios que presenta durante un periodo de tiempo específico.


Ahora solo se requiere una persona con la suficiente influencia o fama con una prenda que llame la atención de la mayor cantidad de personas, para que pronto se encuentre disponible en las tiendas online y gradualmente en tiendas físicas en cuestión de días.


Es inevitable ver constantemente un estilo o una prenda de ropa en personas que siguen sin sentir esa curiosidad por probarlo, de esa forma se genera un gusto en común y la repetición se termina convirtiendo en la nueva tendencia. La tendencia del estilo coquette o el estilo hipster son pruebas de lo variable que pueden ser, y el marketing que lo envuelve no deja respirar al descubrimiento del estilo personal.



Bolsas de plástico de SHEIN 


Las Redes Sociales condicionan nuestro consumo



Cada vez que usamos las redes sociales, una de las cosas que solemos ver es algún producto o servicio que debemos tener. Un review, una opinión, una recomendación o una explicación detallada de los productos que usa tu actor o cantante favorito y cómo este detalle puede elevar su imagen.


El estilo de vida que muestran los hauls de SHEIN, cómo estos creadores de contenido colaboran con las marcas y la inmensidad de sus clósets ya forman parte de nuestro día a día cada vez que entramos en una red social. La influencia de las redes sociales influyen en las tendencias y las tendencias influyen en el consumo del público. El efecto SHEIN parece ineludible.



 

Tendencias, fast fashion y redes sociales: las consecuencias del consumismo actual



Cuando realizamos nuestras compras, no solemos considerar a las personas involucradas detrás de esas prendas o si los procesos de producción de la empresa son transparentes y justos. Muchas de estas compras de $1 o menos no representan ni un pequeño porcentaje de ganancia para los trabajadores textiles.


Para ingresar a una tienda y llevar 3 franelas por $5, la mano de obra y los materiales tuvieron que ser reducidos, para poder establecer un precio de venta tan bajo. Estos suelen ser producidos en países como Bangladesh, donde las condiciones laborales no cumplen con estándares internacionales y el sueldo de los trabajadores textiles está por debajo del umbral de pobreza. Los precios bajos generan consecuencias costosas.


La ropa sigue siendo producida por personas detrás de máquinas de coser, sacando colecciones y colecciones que se desechan en un tiempo cada vez más corto. Prendas que salen en un TikTok o video de YouTube y no vuelven a ser mencionadas ni vistas.


El consumo sin conciencia es tan perjudicial como tirar una envoltura de plástico en la calle. El estilo es amplio y está condicionado por el público consumidor, que no es consciente de que puede generar un cambio en el efecto SHEIN.
Más info