Es el tercer diseñador criollo en llevarse un gramófono por diseño de empaque, que obtuvo por el trabajo “Colegas” de Gilberto Santa Rosa.
Por Jhonson Franco.
La edición 2021 del Latin Grammy fue de regresos luego de un año diferente por el Covid-19. La gala, realizada el 18 de noviembre, volvió a ser presencial, volvió a tener público, volvió a Las Vegas y volvió un gramófono a las manos de un diseñador “made in Venezuela”.
Francisco Piñero fue el tercer diseñador venezolano en ganar un Grammy por diseño de empaque después de Masa (2012) y Pedro Fajardo (2020). Back to back criollo con triple aderezo. A Piñero lo acompañaron Ana González en la dirección de arte y Eduardo “Edo” Sanabria en la ilustración del álbum Colegas de Gilberto Santa Rosa.
Museo de los Niños, primera chispa
“De niño iba mucho al Museo de los Niños. Era ¡guao, excelente! Quedó en mi mente”, dice Piñero emocionado.
“El niño interno siempre tiene que estar. Es truco del diseño. Si maduras mucho no salen las ideas. El niño imagina y visualiza cosas que no ve el adulto. Es clave de la creatividad. Museíto es eso para mí”.
Museíto, imagen del recinto, y El Náufrago, ambas creaciones de Jorge Blanco, “marcaron diferencia en mí. Me encantaría hacerlos en 3D y art toy, respetando al artista Blanco”, comenta el TSU en diseño gráfico del Instituto Monseñor de Talavera.
Ganas sobre las limitaciones
Piñero pensaba en la arquitectura en el liceo, “pero era complicado por lo monetario. Estudié diseño y desde el inicio me gustó. Por la tecnología aprendí cosas que no podía acceder. Las ganas de aprender no me las quitaba nadie”.
En su camino “fue una inspiración los murales de la avenida Francisco de Miranda. Venezuela tenía varias corrientes artísticas mientras crecía. Eso ayudó a artistas y diseñadores”.
Que su padre fuera presidente de Universal Music Venezuela, alimentó a Francisco. “Estando en el instituto visitaba a mi papá en su oficina. Veía posters, carátulas de CD’s, material POP. Iba a la oficina de marketing y me regalaban todo eso”.
El arte de un disco de colección de Guaco y el primer material de Jorge Luis Chacín son algunos trabajos de Piñero, que en Venezuela se dedicó principalmente a la industria publicitaria.
Francisco se fue en 2018 a Miami, donde se centró en la industria musical tras ingresar a InnerCat Music.
La idea de un niño para el Grammy
“De niño me encantaban los cuentos que se transformaban en pop up. Quería hacer uno porque eso se ha perdido”, y para el trabajo de Santa Rosa, “hice la maqueta y al abrir el libro me pareció increíble”, explicó Piñero.
“A partir del éxito del disco le propuse a una escritora de cuentos infantiles sacar un libro de ese estilo. Quiero recordarlo”.
Colegas le permitió al criollo cumplir un sueño. “Trabajar con Edo fue increíble. Mediante su arte hice mi arte. Se unieron corrientes artísticas de venezolanos y dio resultado. Cuando trabajas con alguien que te inspiró sabes que haces las cosas bien”.
Más éxitos
Diseñó la carátula del disco Flow Futurama vol I, del artista Jamby. La ilustración del tema “Hoy” se multiplica en tatuajes.
“La ilustración va por brazos, piernas, espaldas. Me encanta. Carlos Cruz-Diez decía que quería que su arte evolucionara, que lo hicieran otras personas para que esté en todos lados”, destacó el diseñador.
Francisco Piñero y su niño interno siguen inquietos, planeando un proyecto para el próximo Grammy y compartiendo sus conocimientos en su cuenta de Instagram.
