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Manifiesta: El diseño gráfico también es para la protesta pacífica

Las acciones del colectivo multidisciplinario Manifiesta se remontan a 2006 con los 200 pendones por el voto. Desde entonces han mantenido el activismo gráfico.
Por Elina Pérez Urbaneja

El 31 de julio de 2017, que fue el “día después” de las elecciones de la asamblea constituyente, el país amaneció como si lo hubieran molido a palos. Y no era para menos, luego de cuatro meses de lucha civil fieramente reprimida por los uniformados del régimen venezolano que arrojó como resultado más de cien muertos, decenas de heridos y miles de traumas emocionales.

La exaltación que las protestas generaron entre abril y julio no sólo se manifestó en las calles, sino que también copó las redes sociales más usadas en Venezuela: Facebook y Twitter. Incluso Instagram, esa plataforma “para ser bonito y cool”, se llenó de gráfica disidente según mis palabras, o “gráfica reinvindicativa”, según Nacho Clemente.

Ni hablar de la cantidad de memes que circularon por Whatsapp. Los ilustradores y diseñadores gráficos, principalmente, contribuyeron espontáneamente con este fenómeno.

La manito de la Unidad fue creada por el colectivo Manifiesta.

A partir de agosto, el silencio abrupto de la calle ha sido acompañado por el paulatino acallamiento de las redes. Ha ido mermando la gráfica disidente, que –igual como aconteció en el 2014– resultó ser más reactiva que propositiva, más protesta puntual que una contribución tenaz para recuperar nuestra democracia.No obstante, hemos tenido algunas personalidades de la comunicación visual que desde hace 11 años se han dedicado a crear campañas gráficas de oposición al chavismo y que han contribuido con la imagen y diseño de algunas piezas para la Unidad.

Se trata de Manifiesta, cuyo origen se remonta al 2006, con los “200 pendones por el voto”. Al año siguiente, apoyaron las manifestaciones estudiantiles, mientras que en el 2008, fueron los artífices de la campaña contra la reforma constitucional titulada “Gato por liebre”.

En equipo

Carolina Arnal, Rosana Farías y Ricardo Benaím son quienes actualmente forman parte de Manifiesta, que está en estado “recesivo” desde que Chúo Torrealba se fuera de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD). Inicialmente lo integraban más personas que han emigrado del país.

El trabajo más reconocido de Manifiesta es la “manito” de la Unidad. Señala Ricardo Benaím que el icono nació por la sugerencia que le hicieron a quien fuera coordinador de la MUD, Ramón Guillermo Aveledo. Le presentaron dos propuestas: un paraguas de varios colores y la mano con el pulgar hacia arriba, que fue la seleccionada.

Para Benaím la labor gráfica para la política asumida con Manifiesta parte de la inquietud personal: “O lo hacíamos o nos angustiábamos. Si hago, no me angustio, porque estoy contribuyendo, estoy aportando”.

Acción de Dame Letra.
El diseño en la protesta pacífica

La violencia en la calle desatada por los ataques de los “cuerpos de seguridad” del estado a las marchas y concentraciones opositoras no nos han sido extraña desde hace años, intensificándose desde el 2014. En el 2017 emergió como alternativa al enfrentamiento, la protesta pacífica que hace uso de medios creativos como el canto, la consigna poética, el performance y el ensamblaje efímero. Muchos hacen uso del diseño como pieza de apoyo.

Piloneras, Dale letra, Grullas por la libertad, el Laboratorio de no violencia y la Santa Barrera son algunos de estos colectivos cuyos integrantes son adultos profesionales clase media que no van a tirar piedras ni luchar cuerpo a cuerpo con la guardia nacional, pero sí desean aportar conciencia a la población desinformada, y/o apática.

Altar creativo de la Santa Barrera.
Santa Barrera

De estas agrupaciones, la que más involucra diseño es la Santa Barrera, encabezada por Ricardo Benaím y Anita Reyna, con mensajes que involucran la espiritualidad a través de la comunión de las religiones. Se han expresado a través de montajes efímeros en las calles del este caraqueño como los altares sincréticos en los que conviven los ángeles, los rosarios, las vírgenes e imágenes de otras religiones con elementos políticos como la constitución.

Santa Barrera se activó en mayo. Desde entonces han hecho el altar ecuménico, las cruces de junio, el manto sagrado, el gran rosario, los billetes intervenidos, el manto de la libertad, la tipografía empleada por Dale letra y por los ciudadanos en los trancazos y el muro de la libertad junto a la organización de Elías Santana.

Cada acción conlleva un proceso creativo como “Dios manda” en el diseño. Para Ricardo Benaím, el objetivo es “generar esperanza, que es mi válvula interior. La situación me indica que hay que generar autoestima y entusiasmo, pero sobre todo, la fe consciente para estimular los cambios. Esto te conecta con la esperanza, y por ende, cambia tu vida y la de los demás”.

La base de cada acción es “la no violencia”, porque tal como indica Benaím: “es más fácil protestar, que proponer”.

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Publicado originalmente el 14 de septiembre de 2017.

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